Por las cosas que me diste a cuenta gotas
Por el amor dosificado
Por curarme para que enfermara
Por las altas cantidades de poca honestidad
Porque te divertiste conmigo usándome de tu juguete
Por usar a tu favor mis sentimientos
Porque al fin agotaste todas nuestras oportunidades
Por todo lo que revolviste y destruiste para volverme a hacer sentir
de ese amor que se convierte en rabia.
Por todo eso y por todo lo que ya no te daré, tan sólo me queda verter
toda mi sinceridad restante en un solo pensamiento:
Te deseo que tengas un franco y muy feliz CHINGA A TU MADRE.
domingo, 25 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
esto se debe escribir con buena viscera
ResponderEliminar:(
Me uno al coro del franco y feliz CHINGA A TU MADRE.
ResponderEliminarY ojalá que la chingue y bien y relejos.
Te quiero, Huguito, te quiero mucho.
¡Esas son hormonas, chinga!
ResponderEliminarVaya, que me he puesto feliz... ajúa.
Besitos,
La Mariposa.
Óyeme!!
ResponderEliminarUna de estas cosas no puede pasar desapercibida sin chelas que le hagan el honor... tú me dices!!!
Como tú sales tarde, y yo salgo tarde, y la ciudad es más linda de noche, podemos hacerlo una noche ya tarde...
Besoooo.
Claro Mechita, la ciudad nos pertenece, al calor de unas frías cervezas podremos desear al unisono ese añorado y muy feliz "chinga a su madre"
ResponderEliminarMariposa, me alegro en contribuir con tu felicidad, Jo, eso fue puro entripado del bueno, hasta me sentí víctima jajajaja.
Besos y abrazos muy grandes.